Así empezó todo

Había una vez... 
(Los "había una vez" son de cuentos perfectos,mi vida no fue ni será perfecta...pero tampoco voy a borrar mis errores)
Todo empezó cuando nací un 12/09/98. Creo que es preferible contar mi historia con los libros desde donde yo recuerde así que me voy a saltar unos cuantos años.

Mis padres siempre dijeron "Candelita es una niña especial" y hasta el día de hoy creo que tienen razón...

Desde los 6 hasta los 9/10 años fui una niña que  siempre estaba sola, muy sola (o al menos así me veía yo).  No tenía amigos, nadie de los demás compartía mis opiniones y directamente hacían como que no las habían escuchado (cuando sabía perfectamente que eso no era verdad). Estos años me marcaron muchísimo para el tipo de persona que soy ahora, una persona muy extrovertida...que demuestra confianza en sí misma cuando no soy así, pero ése no es el tema del que quiero hablar hoy...

Cuando cumplí 8 años mi abuela me dijo que tenía un regalo muy especial para mí y que (por mi personalidad en ese tiempo) me iba a marcar muchísimo. Estaba que bordaba de alegría y entusiasmo, no sabía de que se trataba pero realmente quería que llegase el momento de la entrega de aquel regalo. Me dio una bolsa chiquita que pesaba muy poco y tenía escrito "Feliz cumpleaños Candela" enorme en la parte delantera. Adentro yacía un pequeño libro, mi primer libro, con dibujos llamativos y letras enormes juntas que de a tanto se separaban (más tarde aprendí que eran "Palabras"). Hasta ése día nunca había tenido un libro en las manos, veía que mi abuela tenía millones pero fueron una gran emoción aquellas páginas llenas de frases pequeñas. Mi abuela me miró y me dijo "eso te va a transportar a un mundo diferente y, bueno, después elegirás si prefieres el real o el que esta dentro de tu cabeza", obviamente a esa edad no entendí mucho aquella frase, hoy puedo decir que tenía toda la razón.
Al poco tiempo empecé a disfrutar de aquella soledad de todos los días, de no estar junto a otros chicos de mi edad jugando por ser juzgada, de estar aislada pero a la vez no. Me encerraba a leerlo una y otra vez sin cansarme, luego fue uno más...otro y otro más, terminaron siendo por lo menos 6 libros infantiles para mi sola (lo cual me hacía extremadamente feliz). Era la pura soledad acompañada de mucha gente.
Al paso de los años dejé un poco de ser juzgada por muchas cosas (tanto físicas como mentales) y empecé a tener unos pocos amigos con los cuales me entendía bastante.
Ahora con 14 años me di cuenta que realmente no estaba tan sola en esos años,si no que yo prefería un mundo dentro de mi cabeza comparado con el que yo estaba viviendo día a día. ¿Por qué? Porque todos me entendían a la perfección y nadie me juzgaba, por eso mismo.

Lo mismo me pasó con la música, relaciono el arte con la lectura desde muchos puntos de vista.

¿Y por qué amo tanto la lectura? Porque para mí fue como una salvación, un "Candela, no estás sola" escrito de otra forma, redactado en cuento e impreso. Fue una de mis tantas salvaciones, la que más puedo reconocer con total sinceridad sin miedo al rechazo. 

Cada historia es diferente y hoy (con una mano en el corazón de sinceridad) les conté la primera parte de mi infancia. Yo no era la típica chica rodeada de amigos y que tenía la mejores cosas pero ahora que lo pienso y reflexiono...

Tenía un libro...¿Qué más podía pedir?